La mayoría de colegios de secundaria lucían vacíos la mañana de este jueves debido al movimiento, convocado por la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE).

Los docentes se concentraron en la rotonda de la Hispanidad, en San Pedro y marcharon hasta el edificio de la Asamblea Legislativa, donde pidieron ser atendidos por el presidente del Congreso, Antonio Alvarez Desanti.

"Esto no tiene que ver solo con los educadores, sino con todos los empleados públicos y es el preámbulo de una huelga indefinida en contra de los proyectos de empleo público", declaró a la prensa el presidente de APSE, Ricardo Molina.

Los sindicatos se oponen a que el Congreso entre a conocer dos proyectos que buscan uniformar las remuneraciones para las distintas categorías laborales, así como restringir los beneficios salariales de que disfrutan los burócratas, tales como pagos por anualidad o dedicación exclusiva.

Tambien rechazan un proyecto impulsado por el gobierno para instaurar la educación dual, la cual consiste en la combinación de enseñanza teórica con la práctica de los estudiantes en empresas privadas.

No solo el Magisterio, sino también trabajadores de distintas instituciones públicas amenazan con una huelga a partir del momento en que los diputados entren a conocer los proyectos de empleo público, lo cual podría ocurrir en el transcurso del mes de setiembre.

La ministra de Educación, Sonia Marta Mora, dijo que el movimiento de huelga no tiene justificación y anunció que la institución rebajará el día de salario a los participantes en la huelga. "Es nuestro deber y lo haremos", manifestó la ministra.