En el informe del Concejo de Gobierno se reiteró la vigencia de la “alerta amarilla” en la zona del volcán Turrialba que sigue presentando actividad freática y tremor (temblores de baja intensidad en el interior del cráter) por lo que las acciones de vigilancia y monitoreo se mantendrán, apunta el informe.

El Gobierno aseguró que la población está tranquila y alerta a las indicaciones de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), agregó que no se han registrado víctimas pero sí importantes daños principalmente en la agricultura.

El Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), garantizó la calidad del agua que consumen los costarricenses “al día de hoy, no presenta ningún tipo de contaminación” aseguran las autoridades de AyA que también informaron sobre el intenso monitoreo que llevan a cabo en las fuentes de agua y las plantas de tratamiento.

El informe del trabajo desarrollado por el sector salud para la zona de afectación destaca la articulación con las otras instituciones de salud para la atención de una eventual emergencia y señala que desde el 2006 está en marcha un plan interinstitucional y protocolos de atención y apoyo a la población, de ocurrir una saturación del Hospital de Turrialba.

El fin de semana anterior, el presidente Luis Guillermo Solís anunció que posponía su gira a varios países europeos durante la visita que hizo a la zona afectada por las erupciones.

Solís se reunió con los integrantes del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) y el Comité Asesor Técnico (CAT) de Vulcanología y ratificó su confianza en la acción articulada que realizan las instituciones en la organización, atención, rehabilitación y vigilancia de la emergencia.

Los centros educativos, que se mantuvieron cerrados durante los dos días de las erupciones, reabrieron sus puertas este lunes y martes y continuarán impartiendo lecciones con normalidad bajo estrictos protocolos de seguridad, afirmó la ministra de Educación, Sonia Marta Mora.

Actividad preventiva

El Gobierno se planteó la atención en la zona en cuatro ejes: organización de la población, rehabilitación de rutas de evacuación, que incluye arreglo de caminos por parte del CONAVI, atención a los efectos en el ganado y la agricultura, y la supervisión y monitoreo de la actividad volcánica.

Así mismo, la CNE reiteró que, a pesar de la aparente calma que presenta el volcán, se mantiene la Alerta Amarilla en los cantones de Turrialba y Alvarado y restricciones de acceso al Parque Nacional Volcán Turrialba.

Los organismos científico-técnicos mantienen un fuerte operativo de vigilancia, monitoreo y análisis de la información y características de los eventos y los diferentes escenarios que se podrían presentar a futuro.

Aunque no se registran erupciones desde el viernes, el volcán está mostrando una actividad muy dinámica con participación de diferentes componentes, señalaron las autoridades.

Por lo tanto, la CNE consideró necesario que la población esté bien informada, dando énfasis a que una erupción no se puede predecir por eso es necesario estar preparados y elaborar a nivel familiar y comunal un plan de emergencia.

El jueves 12 de marzo, el volcán Turrialba volvió a mostrar una importante actividad eruptiva con expulsión de gases y cenizas a la atmósfera que obligó a los guardaparques a activar los protocolos de seguridad y el cierre de carretera a la altura de la Pastora, Las Virtudes y La Central.