Imagen: La manifestación se movilizó por las calles aledañas a la Casa Presidencial. Foto David Selva.

El proyecto, también conocido como “Ley de pesca de arrastre” fue aprobado este jueves por el Plenario Legislativo con 28 votos a favor y 18 en contra, a pesar de que se ofrecieron diversos estudios y criterios de expertos que se oponen a la reactivación de la pesca semi industrial e industrial cerca de las costas.

Las organizaciones que se unieron a la protesta solicitan al presidente Alvarado que vete la Ley, para lo cual, cuenta con 10 días hábiles.

Una parte de los reclamos al Mandatario le recuerdan que durante la campaña electoral de 2018, cuando era candidato a la presidencia, se pronunció en contra de la pesca de arrastre.

Por lo que la imagen predominante en redes sociales es la publicación suya que indica que, “El acuerdo de INCOPESCA, que renueva licencias para embarcaciones de pesca de arrastre debe revocarse. No sólo por sus altos impactos, sino por la prohibición expresa de la Sala Constitucional. Estoy y estaré en contra de la pesca de arrastre.”

Algunas de las consignas que se leen entre los carteles de los manifestantes son: “la pesca de arrastre, arrastra con todo”, “esta ley arrastra nuestras costas a la pobreza”, “cumpla su promesa, vete la ley”, “justicia ambiental = justicia social”, “nuestra biodiversidad no tiene precio”; también hubo apoyo en redes sociales bajo el hashtag “#VetenLaLey” y “#NoALaPescaDeArrastre”.

Al transcurrir la manifestación, el Viceministro de Asuntos Políticos y Diálogo Social, Randall Otárola, el Secretario Técnico del Consejo Nacional Ambiental, Jorge Polimeni así como el asesor de la Primera Vicepresidenta Epsy Campell, Ariel Romero, recibieron a representantes del movimiento, conformado en su mayoría por jóvenes, estudiantes, docentes universitarios y expertos en recursos marítimos, para escuchar las inquietudes del movimiento.

Las organizaciones ecologistas, los expertos, representantes de los pueblos costeros y empresarios del sector turismo insistieron en las graves consecuencias para los ecosistemas marino costeros de la pesca de arrastre y por consiguiente, para la pesca artesanal, la actividad turística y las poblaciones costeras. El viceministro Otárola, se ofreció para dar seguimiento al diálogo.

Cabe mencionar que al proyecto se han opuesto la Procuraduría General de la República, el Ministerio de Ambiente y Energía, el Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (CIMAR) de la Universidad de Costa Rica, las Municipalidades de Nicoya, Hojancha, Carrillo y Nandayure, la Cámara de Pescadores, Armadores y Afines de Guanacaste, la Cámara de Turismo de Guanacaste, la Red de Juventudes y Cambio Climático de Costa Rica, Fridays For Future Costa Rica, Marviva, Green Wolf Costa Rica, Escazú Ahora Costa Rica y otras organizaciones.