El debate en el Congreso entre opositores y oficialistas tuvo momentos de fuerte tensión y enfrentamientos directos, y denuncias sobre la extorsión del oficialismo a los gobernadores opositores amenazándolos con no enviar fondos a sus provincias, si sus legisladores no votan el presupuesto.
La primera ola represiva se desató contra integrantes de movimientos sociales, que estuvieron toda la noche en vigilia en la Plaza del Congreso contra lo que llaman “el presupuesto del FMI”, pero en realidad el operativo estaba destinado a impedir que las grandes columnas avanzaran hacia el lugar, como denunciaron diputados.
Esto fue evidente ya que policías fueron vistos en la noche dejando bolsas con piedras, destinadas a que un grupo de encapuchados atacara a la policía para iniciar los incidentes.
Las organizaciones sociales y sindicales convocantes advirtieron de la presencia de bolsas y volquetes con piedras en las zonas aledañas y la posibilidad de que aparecieran infiltrados para provocar la reacción de las fuerzas de seguridad.
Periodistas denunciaron y demostraron en videos que las fuerzas de seguridad no detuvieron a ninguno de los encapuchados, pero sí persiguieron y dispararon balas de goma hiriendo a varias personas entre ellos a varios periodistas, fotógrafos e incluso el camarógrafo de Telesur.
Hubo un permanente ataque de los efectivos con gas pimienta y disparos de balas de goma como si fuera un estado de guerra, similar a lo sucedido en diciembre pasado cuando se votó la ley provisional y se atacó brutalmente a una movilización multitudinaria, dejando saldo de decenas de heridos, varios graves.
Las fuerzas de seguridad avanzaron sobre manifestantes cercanos a llegar a la Plaza, e incluso la mayoría de los detenidos, entre los que está el director de la popular revista La Garganta Poderosa y varios de sus periodistas, un camarógrafo recién reincorporado a la agencia estatal Télam, en conflicto desde hace meses por el despido de 354 trabajadores. fueron apresados muy lejos de la Plaza.
Adentro del Congreso los diputados opositores solicitaron detener el debate, ante la situación en la calle y varios que salieron intentando pacificar la situación fueron agredidos, como en diciembre de 2017, por las fuerzas de seguridad. El diputado del Frente para la Victoria-Partido Justicialista Andrés Larroque fue muy afectado por el gas pimienta que le tiraron en la cara.
El presupuesto previsto para el año que viene, incluye fuertes recortes en áreas claves como salud, trabajo, educación, vivienda, cultura, ciencia y tecnología, transporte y energía, muy castigados por los recortes del gobierno de Macri desde 2016.
El rechazo al presupuesto elaborado bajo las directivas del FMI fue generalizado y llevó incluso al rompimiento de algunos movimientos como el opositor Frente Renovador, que encabeza el ex candidato presidencial Sergio Massa, quien a pesar de sostener que está en la oposición, ha votado leyes muy duras del oficialismo.
Sonia Alesso, titular de Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) explicó que el proyecto de presupuesto elaborado por el gobierno "tiene un ajuste real del 40 por ciento" para la educación y es "el más bajo desde los '90".
Durante la tarde comenzaron a reagruparse los manifestantes y llegaron hasta la plaza, mientras continuaba aumentando el número de policías, gendarmes y demás fuerzas de seguridad. El debate continuará toda la noche y aún nadie sabe cómo terminará esta sesión y que sucederá este jueves, ya que ha reuniones aceleradas de las centrales sindicales, movimientos políticos y otros.