Los suspendidos son el jefe de la Unidad de Protección de Víctimas y Testigos, Roelis Reyes Pichardo, el Jefe de la Unidad de Vigilancia y Seguimientos, de apellido Flores, y tres agentes más de apellidos Castro, Berrocal y Roldán.
Además, el Tribunal pidió al Director del OIJ, Francisco Segura, el traslado a otros puestos de trabajo de otros cinco funcionarios que fueron identificados con los apellidos Mora (dos de ellos), Durán, Marín y Zamora.
“Este hecho tan lamentable debe investigarse y llevarse hasta las últimas consecuencias; pero también (se debe) hacer una investigación integral de lo que sucede en el OIJ, que nos permita identificar puntos de mejora en la organización y en el servicio que se ofrece a la ciudadanía”, comentó la presidente de la Corte Suprema de Justicia, Zarela Villanueva.
Ante las denuncias de irregularidades operativas en el Organismo de Investigación Judicial, tras la muerte del oficial Jesús Vega Zúñiga, la Corte Plena ordenó que se haga una auditoría operativa al funcionamiento de la Policía Judicial.
Vega Zúñiga, de 26 años, murió ahogado durante una práctica de entrenamiento en el campus de la Earth, en Guácimo de Limón.
El padre de Vega, José Martín Vega, denunció que su hijo fue prácticamente forzado a ir a ese entrenamiento por Reyes Pichardo, pese a que no tenía los implementos necesarios y que fue convocado a última hora.
Vega padre explicó que los agentes fueron obligados a cruzar un río muy crecido y con fuerte corriente sin contar con los instrumentos de seguridad necesarios; cinco de ellos estuvieron en riesgo de morir pero lograron llegar a la otra orilla, no así su hijo.
El director del OIJ, Francisco Zúñiga, afirmó que él no tenía conocimiento de esa actividad, la cual -dijo- fue realizada sin su consentimiento.