Este artículo del ex candidato presidencial del Frente Amplio, José María Villalta, corresponde a un derecho de respuesta a un editorial del matutino La Nación.

Ya han renunciado a demostrar que ellos no son corruptos. Todas sus energías se dedican ahora a hacerle creer a la gente que las fuerzas políticas alternativas también lo serían, que no hay cara en que persignarse y que, por lo tanto, mejor pésimo conocido que cualquier cosa por conocer.

Les preocupa que el Frente Amplio sea la única fuerza política de las cinco más votadas en las últimas elecciones que no tiene que sentarse en el banquillo de los acusados por causas penales y no tiene denuncias pendientes por el financiamiento de su campaña política.

En este contexto se inscribe el caso de la declaración de bienes inmuebles del diputado Gerardo Vargas Varela.

Sigo convencido de que este caso no es igual al del exministro de Hacienda del PLN, Fernando Herrero. La principal diferencia es que el diputado Vargas Varela acudió voluntariamente y sin que nadie lo obligara a la Municipalidad de Turrialba a actualizar el valor de las propiedades inscritas a su nombre.

Esto lo hizo por convicción propia, mucho antes de que el tema saliera a la luz. Las propiedades ya habían sido declaradas por su valor real a la Contraloría. Esto demuestra transparencia, que no había ánimo de ocultar nada. El exministro no actuó de esta forma.

Fue la propia Municipalidad –dirigida por el PLN– la que dijo que no tenía actualizada la plataforma de valores en ese distrito y que no podía tramitar la actualización solicitada del legislador.

El diputado Vargas Varela quería pagar más impuestos, pero la Municipalidad le dijo que lo sentía, que no podía hacerlo. Si el exministro Herrero hubiera ido por su cuenta a actualizar el valor de sus propiedades, también le habría reconocido su actuación.

A pesar de que es clara y evidente la diferencia entre ambos casos, después de revisar en detalle la información disponible, quiero rectificar un aspecto de las declaraciones que di a La Nación el pasado 4 de agosto. Quienes estamos en política siempre debemos estar dispuestos a escuchar y a rectificar cuando se dan buenos argumentos.

Entre los expertos tributarios consultados, existen criterios encontrados sobre el plazo que tenía el diputado Vargas Varela para presentarse a la Municipalidad a actualizar las propiedades inscritas entre el 2011 y el 2014 después de largos procesos de informaciones posesorias. La ley no es clara sobre este punto.

Aquí no hubo actuación dolosa o ánimo de esconder nada, pues el diputado Vargas Varela declaró ante la Contraloría el valor real de las propiedades, cosa que no hacen los que ahora intentan meterlo en su mismo saco. Además, si la Municipalidad de Turrialba no tiene capacidad para actualizar los valores y cobrar montos mayores en el 2015, tampoco la tenía en el 2011 ni en el 2014.

Pero es cierto que lo mejor, lo más conveniente, hubiera sido que el diputado Vargas Varela acudiera a hacer la actualización del valor de la propiedad inmediatamente después de que estas fueron inscritas, aunque le habrían dado la misma respuesta que ahora: no podemos tramitarle la actualización.

Por esta razón, como el diputado Vargas Varela no tiene nada que ocultar y no es igual a los políticos que se amparan en las ambigüedades de la ley para eludir el pago de impuestos, se apersonará hoy mismo a la Municipalidad de Turrialba para pedir que se inicie un procedimiento para que dicha autoridad determine si cometió un error y, de ser así, proceder a la rectificación respectiva.

Mientras tanto, como garantía de buena fe y transparencia, depositará judicialmente a nombre de la Municipalidad los importes correspondientes a diferencias de dinero (y sus intereses) por los impuestos que podrían haberse pagado si se hubieran hecho las actualizaciones en la fecha de inscripción de las propiedades.

Que esta experiencia sirva para que todas las personas que aspiran a puestos de elección popular por el Frente Amplio revisen bien el estado de sus declaraciones de bienes inmuebles y las pongan al día. Si les dicen que no pueden recibirles la declaración, que lo hagan constar por escrito. No sea que después les pase como al diputado Vargas Varela.

Por último, quiero pedirles a todos ustedes que no se enojen con la prensa. Su papel es fundamental para fortalecer la democracia. Que midan al Frente Amplio con una vara mucho más fina y rigurosa que la que aplican al resto de partidos políticos más bien confirma, sin duda alguna, que no somos los mismos de siempre.